En un paseo matutino por las calles de Hwange, en nuestra desesperación por poder tomarnos un café, ardua tarea en un país que sobrevive a la sombra, pues en la sombra de unos arboles conocimos a Rossan. El sol era un plomo y el polvo una nube maloliente. Ya cansados nos sentamos al borde de una carretera y al rato el ruido metálico de una maraca acompañaba una canción que Rossan susurraba como un juego. Sus ojos dejaron de ver cuando era una niña y en su piel clara el sol marcaba casi como una maldición cicatrices de silencio. En África los albinos son seres despreciados por considerarlos malditos, fruto de la brujería y la superstición, son aquellos que por ser miserables no bastase mas aun tuviesen que ser albinos. Zimbabwe es el país con mayor número de albinos del mundo, y puedes ver a muchas personas albinas acompañadas por un lazarillo. Pero también en las ciudades y en los pueblos más grandes te encontraras un empleado de correos, un policía, un señor con sombrero, una mujer con un paraguas o un niño corriendo. Debemos de romper con tabus y complejos, y dibujar dignidad en los rostros de los niños y niñas albinos, colorear con azúcar sus palabras y vestir de esperanza sus corazones.
5 jun 2011
Soy albina
En un paseo matutino por las calles de Hwange, en nuestra desesperación por poder tomarnos un café, ardua tarea en un país que sobrevive a la sombra, pues en la sombra de unos arboles conocimos a Rossan. El sol era un plomo y el polvo una nube maloliente. Ya cansados nos sentamos al borde de una carretera y al rato el ruido metálico de una maraca acompañaba una canción que Rossan susurraba como un juego. Sus ojos dejaron de ver cuando era una niña y en su piel clara el sol marcaba casi como una maldición cicatrices de silencio. En África los albinos son seres despreciados por considerarlos malditos, fruto de la brujería y la superstición, son aquellos que por ser miserables no bastase mas aun tuviesen que ser albinos. Zimbabwe es el país con mayor número de albinos del mundo, y puedes ver a muchas personas albinas acompañadas por un lazarillo. Pero también en las ciudades y en los pueblos más grandes te encontraras un empleado de correos, un policía, un señor con sombrero, una mujer con un paraguas o un niño corriendo. Debemos de romper con tabus y complejos, y dibujar dignidad en los rostros de los niños y niñas albinos, colorear con azúcar sus palabras y vestir de esperanza sus corazones.
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Como yo lo entiendo, se trata de una jugada que le hace a uno la genetica, como la homosexualidad. Y ahora, que Uxio me eche los perros ...
ResponderEliminarNaiara, no todo va a ser genetica,hostia pues!la homosexualidad es cosa de hombres, como el futbol y el toreo...en definitiva,prefiero un hijo futbolista y del R.Madrid,no te jode!
ResponderEliminarChica ahora donde vives? y el bebe?
biquiños!
Anonimo, la homosexualidad afecta tanto a hombres como a mujeres. Tu preferirias un hijo futbolista y del Real Madrid en vez de homosexual o mongoloide, pero la genetica no te permite escoger: tienes que quedarte con las cartas que te tocan.
ResponderEliminarSOUSA-POZA